Serena Conti
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Serena Conti, diseñadora de moda e ilustradora italiana, se ha consolidado como una influyente consultora, especializada sobre todo en denim. Su punto fuerte es la creación meticulosa de colecciones para marcas de renombre del sector.
Tras licenciarse en Diseño de Moda por la Facultad de Diseño y Arte de la Universidad de Venecia, alcanzó inmediatamente el éxito internacional con su primera colección, «Confidencias de los Elementos», expuesta en el Centro de Diseño de Moda Ichinomya de Japón. Su trayectoria continuó con la investigación de tendencias en Pitti Filati (Florencia), mientras que el diseño comenzó con colaboraciones para figuras de la moda mundial como Karl Lagerfeld, John Galliano para Maison Dior y C’N’C Costume National, profundizando así en su pasión definitiva: el Denim.
Al mismo tiempo, Serena se embarcó en colaboraciones centradas en la ilustración y el diseño gráfico, aventurándose a trabajar como freelance para editoriales. A lo largo de los años, sus esfuerzos artísticos se han ampliado al diseño de decorados de teatro, carteles y anuncios para diversas industrias. En 2017, su trabajo artesanal le valió el prestigioso premio Denim Gallery de Nueva York como mejor diseñadora.
En su creación para Denim Gallery, Serena se inspira en la cruda dicotomía entre la Guerra y el Amor. Imagina los pantalones vaqueros como lienzos, transformados en papel para que los soldados escriban innumerables cartas a sus seres queridos. Esta representación artística transforma el tejido vaquero en un símbolo conmovedor, que culmina con la catártica floración de una rosa, una metáfora evocadora que simboliza la esperanza y el consuelo en tiempos turbulentos.
Tras consolidarse en el proyecto Denim Gallery, tuvimos el privilegio de sentarnos a entrevistarla en profundidad.
¿Cómo fue colaborar con Tonello?
¿Qué beneficios obtuvo de la experiencia de Denim Gallery desde el punto de vista laboral?
La Denim Gallery fue una experiencia fundamental para mí, extremadamente formativa. Me puso en contacto con gente de distintas partes del mundo y me expuso a formas de pensar y crear completamente diferentes. Fui testigo de resultados notables, sobre todo de Sudamérica, países con los que no había interactuado antes, lo que me abrió las puertas a una serie de colaboraciones y amistades hasta entonces inexploradas. Además, la oportunidad de utilizar maquinaria de última generación, no fácilmente accesible a todo el mundo, añadió un valor sustancial a mi papel como diseñador. Esta experiencia ha potenciado mis dotes de consultoría, amplificando la importancia de mis opiniones y conocimientos en la materia.
¿Puede decirnos qué ha cambiado desde su punto de vista profesional y personal en estos tres años?
Ganar el premio fue un gran honor, me permitió traspasar los límites tradicionales de ser diseñador de denim. Además de diseñadora, también soy ilustradora, y aprovechar el premio en este ámbito fue increíblemente gratificante. Me ha dado la libertad de expresar mi creatividad, lo que se ha traducido en numerosas peticiones: la gente se ha puesto en contacto conmigo para realizar diversas ilustraciones sobre denim, ¡y para mí combinar estas dos pasiones ha sido la apoteosis de la alegría!