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Colores vibrantes: todos los trucos para mantener los colores brillantes

¿Por qué es importante conocer todos los trucos para mantener los colores de nuestras prendas brillantes, lavado tras lavado, durante el mayor tiempo posible?

Porque, como decía Goethe, «Los colores son acciones de la luz. Acciones y pasiones»: palabras que transmiten energía, vivacidad, positividad. Es por eso que todos siempre hemos estado tan fascinados por los colores. Cada uno de ellos, según nuestra tradición cultural, tiene un significado diferente, a veces incluso opuesto (pensemos en el blanco, por ejemplo, que en Italia o en Europa es el color de la pureza, mientras que en Japón representa el luto).

Dicho esto, es bastante claro cómo los colores en el mundo de la ropa y la moda son muy importantes porque expresan la personalidad y el estado de ánimo de quienes eligen usarlos, tal vez para ocasiones especiales.

Hemos preparado para ti una guía simple y detallada sobre cómo preservar a lo largo del tiempo los colores brillantes de tus prendas favoritas con remedios realmente al alcance de todos: ¡aquí está!

1. Los tejidos y su impacto en los colores

En primer lugar, es fundamental comprender el tipo de tejido. Algodón, seda, sintéticos… cada material reacciona de manera diferente a los procesos de lavado y secado.

Por ejemplo, los tejidos naturales como el algodón tienden a perder color más fácilmente que los sintéticos. Elegir tejidos de alta calidad es el primer paso para garantizar una mayor duración del color.

© Moses Janga | Via Unsplash Animated Line

2. Lavado y post-lavado: algunos consejos para proteger el color

Separar los colores: un must para el cuidado de las prendas

A pesar de que existen detergentes cada vez más «inteligentes» que permiten mezclar en la lavadora prendas blancas y de colores, nuestro consejo apasionado es que no lo hagas.

Para minimizar el riesgo de transferencia de color de una prenda a otra, separa cuidadosamente no solo las prendas claras de las oscuras, sino también los colores muy vibrantes de los más oscuros. Y usa detergentes suaves, específicos para prendas de colores, que ayudan a mantener la intensidad del color y prevenir la decoloración.

Sí, lo sabemos: es complicado, pero preferimos llamarlo cuidado y atención para prendas que has elegido personalmente y que, por lo tanto, te gustaría que duraran mucho, mucho tiempo.

 

La temperatura del agua: nunca demasiado caliente

El agua demasiado caliente es enemiga de los colores brillantes.

Elige, por lo tanto, un lavado en frío o a temperatura moderada, según sea necesario: a veces mezclamos en la lavadora prendas muy sucias y otras que solo necesitan un «refresco» con un lavado ligero: esto también es un error.

Para proteger los colores y mantenerlos brillantes, recuerda seleccionar siempre la temperatura más baja posible (máximo 30 grados): de esta manera no solo protegerás los colores, sino que también reducirás el consumo de energía con una elección ecológica.

Además, en caso de manchas difíciles de quitar, antes de poner las prendas en la lavadora, tamponéales delicadamente con un paño humedecido en agua y detergente, sin frotar demasiado enérgicamente.

Y si tus prendas son particularmente delicadas o caras, ¡lávalas a mano! Esto es válido también y especialmente, por ejemplo, para tus hermosos suéteres de lana.

 

Secado y planchado: la atención nunca es demasiada

¿Sol? No, gracias. El secado al sol puede desvanecer los colores. Elige, por lo tanto, un lugar ventilado y sombreado. También el uso de la secadora debe limitarse al mínimo indispensable: si realmente no puedes prescindir de ella, elige un programa a baja temperatura para tejidos delicados y deténlo cuando las prendas estén aún ligeramente húmedas (puedes terminar de secarlas colocándolas en un tendedero en el interior o, si el tiempo lo permite, en el exterior, pero recuerda, siempre a la sombra).

Para planchar, no calientes demasiado la plancha y pásala por el revés de las prendas.

 

El consejo de la abuela: revitaliza los colores con sal

Es un truco muy antiguo, pero aún funciona.

Agregar un puñado de sal en el ciclo de lavado puede ayudar a fijar los colores y prevenir su decoloración. La sal marina es particularmente efectiva.

Como alternativa, también un vaso de vinagre blanco o bicarbonato de sodio ayudan a fijar los colores.

En resumen, para mantener tus prendas coloridas hermosas y brillantes durante mucho tiempo:

  1. lávalas a baja temperatura con detergentes suaves específicos para tejidos de colores y lava a mano las prendas más delicadas y caras
  2. no mezcles blancos y colores o colores claros y oscuros
  3. para quitar las manchas difíciles, antes de ponerlas en la lavadora, tamponéalas delicadamente con agua y detergente
  4. no abuses de la secadora y evita el sol
  5. plánchalas del revés y con la plancha nunca demasiado caliente

Asegúrate de que tu vestuario mantiene siempre un brillo a la última! 😉

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